Vecinos de Temuco denuncian el uso de fuegos artificiales en distintos sectores de la ciudad y en pleno toque de queda. Por su parte, el Gobierno se comprometió a aumentar el control policial.

Hasta la Intendencia Regional llegaron dirigentes vecinales de los macrosectores de Pedro de Valdivia, Amanecer y Villa Los Ríos para solicitar al Gobierno un aumento en las fiscalizaciones sobre el uso de fuegos artificiales.

A esto se suman estruendos por bombas de ruido y disparos al aire, cuestión que se ha repetido en los últimos días y que temen aumente durante las celebraciones de Año Nuevo.

Así lo indicó José Sáez, del comité de seguridad ciudadana de Villa Los Ríos y Patricia Reyes, presidenta de la Junta de Vecinos Huertos Urbanos del sector Amanecer.

“Suenan los petardos o los juegos artificiales porque están vendiendo droga, entonces hemos tenido poca empatía con la autoridad, porque nos sentimos realmente solos. Creemos que estamos perdiendo la batalla contra la droga”, declaró Sáez.

El gobernador de Cautín, Richard Caifal recibió el reclamo de los vecinos y anunció un reforzamiento de los controles en esos macrosectores de Temuco.

“El prefecto me manifestó también su voluntad, su disposición a aumentar no solamente la fiscalización o los controles, sino también (el control sobre) la venta de los fuegos artificiales y por último, también hacer un llamado a la ciudadanía en general para cuidar también a nuestras mascotas que son las que sufren con los fuegos artificiales”, sostuvo.

Los dirigentes piden al Gobierno incrementar la presencia policial y de personal del Ejército, ya que insisten estos hechos ocurren en pleno de toque de queda y cuyo ruido afecta a adultos mayores, niños y mascotas.