Un joven de 27 años de edad, quien en mayo de 2018 generó un accidente de tránsito mientras conducía ebrio una camioneta en Padre Las Casas, fue condenado a cuatro años de presidio, además del pago de una indemnización superior a los 147 millones de pesos.
Debido a la emergencia, uno de sus acompañantes quedó discapacitado de por vida, dejando un saldo de otros tres lesionados.
Se trata de Héctor Miguel Aranda Osses, quien -la madrugada del 12 de mayo de 2018 a la altura del kilómetro dos de la exlongitudinal sur en la comuna ya señalad- chocó un automóvil que se había detenido por la neblina en el lugar, impactando además por alcance a alta velocidad a un camión que efectuaba un viraje.
Esto último generó que uno de sus acompañantes, de 25 años, quedara con una discapacidad superior al 96% al salir eyectado de la camioneta e impactar con su cabeza al camión, siendo hoy imposible que se valga por sus medios, al tiempo que otros tres acompañantes quedaron con diversas lesiones.
Tras el juicio oral, desarrollado en noviembre de 2019 en Temuco y que estuvo suspendido tras el veredicto condenatorio por una presentación al Tribunal Constitucional, Aranda Osses fue condenado a cuatro años de presidio, con “libertad vigilada especial”, más el pago de una multa superior a los cuatrocientos mil pesos y las costas de la causa.
El fiscal del Ministerio Público, Juan Pablo Gerli, precisó que el año de presidio que debe cumplir quien comete este tipo de delitos por la denominada “Ley Emilia”, le fue reemplazada por el tiempo que estuvo sujeto a medidas cautelares.
Además, los jueces acogieron una demanda civil interpuesta en favor del joven que quedó con secuelas irreversibles, por lo que el condenado deberá pagar más de 147 millones de pesos por concepto de lucro cesante y daño moral, quedando además inhabilitado de por vida para conducir.
