El intendente de La Araucanía reconoció que “no se hicieron bien las cosas”, tras el violento desalojo que terminó con diversos heridos y detenidos en la toma Pichicautín de Temuco.

La polémica surgió al conocerse que el terreno en cuestión no pertenecía al municipio de Temuco, ente que solicitó el trámite, que a su vez fue autorizado por la Gobernación Provincial de Cautín.

Es este contexto que se produjo un violento desalojo del Comité Ampliación Pichicautín, que dejó 10 personas detenidas, 7 carabineros lesionados, además de varios vecinos en la misma condición, lo que se sumó a las viviendas provisorias destruidas en el lugar.

El intendente de La Araucanía, Víctor Manoli, evitó establecer responsabilidades e indicó que están investigando la situación, añadiendo que vendrán más desalojos.

“No se hicieron bien las cosas, debe existir una voluntad de las partes de desalojar en forma pacífica, porque en caso contrario, nosotros vamos a proceder a hacer cumplir la ley”, dijo el jefe regional.

Quien sí responsabilizó al gobernador Richard Caifal, fue el diputado oficialista Miguel Mellado, quien calificó lo sucedido como un “error tremendo”.

“El gobernador Caifal colocó su firma para el desalojo y después empezó a hacer los estudios pertinentes, eso es un error tremendo. Yo creo que la responsabilidad total es del gobernador”, expresó.

Desde la Corporación de Profesionales Mapuches, Enama, su presidente Hugo Alcamán, respaldó al gobernador e indicó que la responsabilidad del desalojo es del municipio.

A raíz de lo sucedido, los vecinos recurrieron a la Contraloría con el fin de establecer responsabilidades y conocer a qué repartición pertenece el terreno, mientras que la Comisión de Vivienda de la Cámara citó al alcalde de Temuco, Miguel Becker, y al gobernador de Cautín para explicar los hechos.