Una huelga de hambre líquida inició en Temuco el presidente de la Asociación de Funcionarios Penitenciarios (ANFUP) de Cautín, acusando diversas irregularidades en la gestión de la dirección Regional de Gendamería, además de persecusión sindical.

Se trata del cabo primero de Gendarmería, David Diocarez Catalán, quien asumió la medida de presión para denunciar la situación que, según asevera, afecta a funcionarios de la unidad penal de Nueva Imperial que se desempeñan como centinelas, quienes por usar licencias médicas serán trasladados a otros recintos.

El dirigente insiste en que no ocurre lo mismo con oficiales que por varios meses también han usado licencia médica.

La denuncia del dirigente alude al director regional de Gendarmería, coronel Leonardo Barrientos.

El dirigente aseveró que, sin embargo, el director nada ha hecho respecto de oficiales que estarían desde hace seis meses con licencia médica, agregando a su demanda lo que describió como una persecución al sindicato que preside, detallando que enfrenta varios sumarios administrativos iniciados en su contra por orden de la autoridad regional de Gendarmeria.

Se espera que este lunes la institución se refiera a las denuncias del dirigente, quien además pide la directa intervención en la zona, del director nacional de Gendarmería, Christian Alveal.