El intendente de La Araucanía, Jorge Atton, confirmó que el Gobierno presentó dos querellas: una por Ley Antiterrorista y otra por el delito de incendio, debido a los últimos ataques incendiarios ocurridos en la región.

Además, solicitó un fiscal con dedicación exclusiva para investigar los últimos hechos de violencia registrados en la región.

La querella por Ley Antiterrorista fue presentada debido a que la madrugada del lunes, fueron siniestradas seis máquinas forestales en un sector rural de Temuco, hecho adjudicado por la Coordinadora Arauco Malleco.

Además, existió un ataque en la comuna de Galvarino, en donde fue incendiado un galpón con dos tractores en su interior, por este hecho el intendente anunció la querella por incendio.

Jorge Atton, informó que en conversaciones con el Ministro del Interior, solicitó que sea designado un fiscal con dedicación exclusiva para investigar estos ataques, considerando los nulos avances que se han logrado ante hechos de similares características, manteniendo la sensación de impunidad en la zona.

“Debemos recordar que ya en el periodo entre diciembre y ahora llevamos cuatro querellas, que han sido presentadas de carácter terrorista y hasta el minuto no hemos tenido ningún tipo de avance, ni tampoco resultados respecto a las investigaciones”, señaló el intendente.

Ante estos hechos y en base a la iniciativa del Gobierno de presentar una Ley Corta para agilizar la tramitación de la Ley Antiterrorista y la solicitud de los gremios de restablecer el Estado de Excepción Constitucional en la zona, el vocero del Consejo de Todas Las Tierras, Aucan Huilcaman, aseguró que son decisiones que no contribuyen a solucionar el conflicto que existe en la región.

Junto con la presentación de estas querellas y la necesidad de un fiscal con dedicación exclusiva para estos casos, el intendente, precisó que solicitaron al Director Nacional de la PDI, reforzar con personal especializado el trabajo de la BIPE en Temuco, buscando avances concretos frente casos de violencia rural.

Ambos ataques incendiarios dejaron pérdidas en maquinaria e insumos avaluadas en más de 400 millones de pesos.