Una güiña de tan sólo semanas de vida encontrada en Galvarino fue entregada al Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) de Temuco, región de La Araucanía.
Un agricultor entregó el felino a Carabineros de la Tenencia de Galvarino, luego de haberlo encontrado en un campo cuando realizaba faenas agrícolas.
Dos inspectores del SAG evaluaron el estado del mamífero -protegido por la Ley de caza- y lo derivaron al centro de rescate de la Clínica Veterinaria Metrenco.
La directora del SAG en La Araucanía, María Teresa Fernández, destacó el apoyo de Carabineros quienes protegieron al mamífero que se encuentra en peligro de extinción.
Por su parte, la médico veterinaria, Ana Karina Krause, de la Clínica Veterinaria Metrenco, detalló que la guiña tendría entre dos a tres semanas de vida.
También indicó que se encuentra desnutrida, con un importante grado de deshidratación y una alta carga parasitaria.
Sin embargo, la profesional recalcó que estas especies silvestres no deben ser extraídas de su hábitat natural.
“Al momento de encontrar estos animales nunca hay que tomarlo porque no están solos lo más probable es que la madre se encuentre cazando para alimentar a sus crías”, indicó.
Por otra parte, Krause aclaró que existen muy bajas posibilidades de reinsertar a una especie que fue extraída de su hábitat a tan temprana edad.
Finalmente, la directora del SAG Araucanía hizo un llamado a la comunidad a cuidar la fauna silvestre.
En peligro de extinción
El gato güiña (Leopardus guigna) está protegido por la Ley de Caza, normativa en la cual la especie está catalogada en Peligro de Extinción.
Es considerado benéfico para las actividades silvoagropecuarias y para la mantención del equilibrio de los ecosistemas naturales.
Esta especie es la más pequeña de los felinos salvajes de América. En Chile está presente desde la zona central hasta la Patagonia.
Su longitud varía entre los 65 y 73 cm y su peso es de 2 a 3 kilos. Su pelaje mimético se caracteriza por tener manchas negras y redondas y el fondo de su pelaje color marrón.