Con sistemas fotovoltaicos, los Comité de Agua Potable Rural (APR) de La Araucanía buscan disminuir los costos en consumo de energía eléctrica y hacer frente a las constantes interrupciones del servicio.

El programa piloto impulsado por el Gobierno Regional instaló 25 proyectos, beneficiando al mismo número de APR de toda la región, pero paralelamente otros 10 comités han auto financiado dispositivos similares.

El ahorro de energía promedia el 30% y esto permite disminuir los costos operacionales.

La información fue entregada en un taller de capacitación sobre la modificación al código de agua, dirigido a los dirigentes.

El seremi de Obras Públicas en La Araucanía, Luís Emilio Roa, dijo que esta región es una de las tiene el mayor número de APR funcionando.

En caso de interrupciones del servicio eléctrico, este sistema fotovoltaico permite mantener el funcionamiento sólo por un par de horas, no entrega autonomía por varios días. Por lo tanto, el problema no se soluciona por completo.

El director general de aguas, Carlos Estévez Valencia, expuso sobre la reforma al código de agua y cómo se relaciona con los APR y precisó que a nivel nacional alrededor 800 mil personas reciben agua gestionada por estos comités.

Y es esto último lo que se pretende cambiar con las 2 reformas al código de agua que actualmente están en trámite en el Congreso: una permitirá poner atención en la calidad del servicio que proveen los APR, mediante la fiscalización y sanción.

La otra busca que se priorice el derecho de uso de agua para el consumo humano, no se atente contra el ecosistema y se preserve la sustentabilidad del recurso.

El jefe de la oficina regional de la Superintendencia de Servicios Sanitarios, Joan Milanca, dijo que con la nueva ley de APR podrán fiscalizar los comités.

Milanca recordó que el año 2016, la empresa Aguas Araucanía fue la segunda más multada a nivel nacional.

Sólo por los problemas en la comuna de Carahue la compañía fue infraccionada 2 veces y la multa supera los 190 millones de pesos.