El Estado de Chile debe reconocer que existe un conflicto en La Araucanía con el pueblo mapuche y que la solución debe ser política. Esas fueron algunas de las conclusiones del sexto informe anual del Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH).
Se trata de un documento donde se analizaron distintos temas, relevándose la situación de violencia y las acciones que deben seguir las autoridades para poder llegar a un acuerdo.
Federico Aguirre, jefe de la sede de INDH en la región, indicó que el Estado tiene una deuda con el pueblo mapuche y también con quienes se han visto afectados por las consecuencia de un conflicto que no encuentra solución.
En esa misma línea sostuvo que el problema se está invisibilizando, apuntando a que “hay un Estado que rehúye de reconocer la existencia del conflicto. Si la quema de dos iglesias se produjera en la región Metropolitana, probablemente en el debate público el tema del conflicto tendría otro cariz”.
Junto con ello aseguró que “los derechos de muchos actores y muchos sectores de la región se encuentran invisibilizados y al conflicto también se le quiere invisibilizar”.
El representante del INDH aseguró que el diálogo es una de las medidas para avanzar en resoluciones, además de reconocer los derechos de los pueblos indígenas y sobre todo el mapuche, quienes hasta el momento no cuentan con representación política.
