La abogada de la Defensoría Penal Mapuche, Manuela Royo, que fue sacada del caso Luchsinger-Mackay, dijo que sus superiores la marginaron por presiones políticas y denunció que hay inocentes privados de libertad.

Manuela Royo indicó que ella ha ejercido una defensa técnica y profesional, y precisó que cuestionar su trabajo en ese sentido no tiene justificación.

Además agregó que lo que se intenta es coartar su libertad de expresión, porque mientras no afecte a sus representados puede opinar, como lo hizo, sobre el fiscal jefe de temuco Alberto Chifelle.

Ella aparece en un video donde se llama a una manifrestación contra el persecutor que es parte del equipo que investiga el crimen del matrimonio Luchsinger-Mackay.

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La abogada defensora señaló que de acuerdo a la ley 19.718 el defensor jefe, Pablo Arduain, no tiene las atribuciones legales para separarla de la defensa de sus representados en el caso Luchsinger. Y agregó que han existido presiones políticas, lo que demuestra que la Defensoría Penal Pública requiere autonomía.

Manuela Royo dijo que seguirá defendiendo a los imputados del caso Luchsinger-Mackay y precisó que sí la Defensoría insiste en sacarla de la causa, no descarta renunciar para ejercer la defensa privada de los imputados.

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La profesional agregó que la familia de los 3 mapuches imputados que ella defiende le manifestaron su apoyo y respaldo.