El cuerpo de un ciudadano haitiano que murió el 26 de diciembre de 2017 en la localidad de Cogotí, lleva más de un año en la morgue de Ovalle, en la región de Coquimbo.

Se trata del cuerpo de Louines Lafleur y se desconoce si él tenía familia o cercanos en Haití para poder contactar. Al ser consultados sobre el caso, desde la Seremi de Justicia y Derechos Humanos precisaron que por el momento aún no se ha emitido una orden de entrega por parte de la Fiscalía y que los documentos se mantienen en el Ministerio de Relaciones Exteriores.

En tanto, desde la Fiscalía indicaron que hasta esta fecha no se ha originado ninguna petición de retiro del cuerpo.

En cuanto a su muerte, tras el reconocimiento externo policial, no se encontraron lesiones atribuibles a terceras personas y la PDI había precisado que la causa probable de muerte era un infarto al miocardio.

El ciudadano senegalés Mamadou Gueye, que perteneció a la Mesa de Migración en Ovalle, había contado a diario El Ovallino que se estaba haciendo “todo lo posible para poder lograr tener algún papel vinculado a su familia, pero todavía no lo tenemos. No se puede sepultar porque necesitan a un familiar directo, eso se está pidiendo”.

Gueye recuerda que en febrero de 2018 acudió a diversas instituciones, entre ellas a la Embajada de Haití: “La embajada o consulado no coopera, ellos son los representantes legales de esa comunidad en Chile, y si no pueden apoyarlos, ¿quién lo haría?”.

El caso del ciudadano haitiano es sumamente complejo, ya que Gueye declara que al parecer éste no tendría familia en Haití, sólo amigos en Chile, los que tampoco podrían colaborar para retirar los restos.