En la caleta Punta de Choros, ubicada frente a la Reserva Mundial del Pingüino de Humboldt, en el límite de la región de Coquimbo y Atacama, se preparan para exportar su producción de locos en conserva y el Gobierno comprometió su apoyo.

“Esta planta partió como una locura”, así recuerdan los pescadores artesanales de Punta de Choros el sueño de instalar una planta en su localidad, durante los años 80.

Se organizaron como asociación gremial y en 8 años avanzaron para implementar una planta procesadora de conservas de locos. Hoy son 155 socios que integran la Cooperativa Pesquera y Comercializadora Punta Norte.

“Para la pesca artesanal es un hito (…) Estamos agregando valor a nuestra producción de locos, que extraemos del área de manejo, ubicada en el sector de la Reserva”, expresó Óscar Avilez, presidente de la Cooperativa.

En los últimos tres años el proyecto recibió apoyo de Corfo a través del Proyecto Asociativo para la Microempresa (PAM) Punta de Choros, que tuvo un financiamiento total de $198 millones, de los cuales $127 millones corresponden al organismo y $71 millones salieron desde la cooperativa.

El director regional de Corfo, Gregorio Rodríguez, destacó la labor realizada por la cooperativa para contar con esta línea de procesamiento en la zona. “Los medianos y pequeños empresarios son el motor que genera el empleo y vamos a trabajar en capacitarlos y prepararlos para el comercio exterior (…) Esta planta tiene buen estándar sanitario y eso nos permite poder ingresar a los mercados internacionales”.

“Tenemos expectativas en el apoyo del gobierno para el resto de las caletas, porque este es el camino a seguir con otros productos, como las machas”, expresó Franklin Zepeda, presidente de la Federación Regional de Trabajadores del Mar en Elqui.

“Esta planta de procesos va a significar un mayor valor agregado a la pesca extractiva, en las áreas de manejo y proyectos acuícolas”, indicó el seremi de Economía, Luis Arjona.

“Entendemos que ahora necesitamos invertir en capital humano, en operadores, jefes de planta, manipuladores, para cumplir con exigencias de los mercados”, agregó Arjona.

Parte de los desafíos importantes que tienen en la cooperativa de Punta de Choros, es obtener la denominación de origen del producto y generar el proceso de conserva para otros recursos que extraen en la Reserva de Isla Damas, Choros y Chañaral.

Proyectan también generar negocios en conjunto con otras caletas de la región de Coquimbo.