Mal estado de los caminos, nula pavimentación en los sectores altos, escasa conectividad vial y peatonal, déficit de alcantarillado, lumunarias y seguridad, son algunas de las principales demandas que la comunidad del sector La Herradura exigen al municipio de Coquimbo, solucione.
Desde la administración comunal indicaron que sólo hace algunos meses las calles del balneario fueron declaradas Bienes Nacionales de Uso Público para acceder a urbanización, lo que significa un paso para abordar las demandas existentes.
Estas carencias, sostienen los pobladores, son fruto de un histórico abandono, por el cual ya alzaron la voz ante el municipio y el Gobierno Regional el año 2014, logrando frenar las autorizaciones para la construcción de edificios en el borde costero y casco histórico del pueblo.
Sin embargo, y a dos años de aquello, acusan que el progreso del sector La Herradura no es lo que esperaban: al explosivo poblamiento de los sectores altos, la contaminación por microbasurales y malos olores provenientes del relleno sanitario El Panul, se agrega el mal estado de los caminos en zonas residenciales y la falta de acceso a servicios básicos.
Demandas
Uno de los principales problemas existentes en La Herradura es la mala distribución y subdivisión de los terrenos, además de la propiedad de ellos.
No obstante, la comunidad logró el año 2015 obtener la denominación de Bien Nacional de Uso Público para las calles existentes en el perímetro antiguo y alto del balneario; lo que, según los vecinos, hoy permite a las autoridades comunales y regionales ejecutar proyectos e inversión.
Sin embargo, al no existir la urbanización de las vías en zonas residenciales ni una red de alcantarillado, se hace difícil el acceso para los camiones que deben realizar la limpieza de las fosas sépticas.
“La Herradura no puede seguir esperando a que el progreso llegue y eso lo hacemos saber a las autoridades. Muchos habitantes de este sector no contamos con caminos para llegar a nuestras casas, alcantarillado, y menos luminarias para dar seguridad a las calles. A esto le sigue la carencia de vías para la evacuación ante un tsunami y la contaminación. El alcalde sabe de esto y debe actuar”, alertó Nelson Herrera, director de la junta de vecinos N°15 de La Herradura.
