El malfuncionamiento de una planta de tratamiento de aguas servidas, en la localidad de Puerto Río Tranquilo, llevó al presidente de la Junta de Vecinos, Rubén Sandoval, y a la presidenta de la Cámara de Turismo y Comercio, Carina Briones, a escribirle una carta al alcalde de Río Ibáñez, Marcelo Santana.

En la misiva, los presidentes indicaron que, hace un par de días, “algunos lugares del pueblo estuvieron anegados por hecesdado el malfuncionamiento por el que atraviesa la planta.

Durante el pasado mes de abril, la municipalidad puso término al contrato que tenía con la empresa Aguasin S.A., quedando a cargo de las gestiones Aguas Patagonia por treinta días.

En ese entonces, el mejoramiento de las condiciones de la planta fue anunciado por las autoridades locales, además del compromiso de licitar un nuevo contrato.

No obstante, de lo anterior nada se ha concretado. Por el contrario, los dirigentes acusaron que “las recientes subidas del caudal del río más los desechos sin procesar, colaboraron a que éstos lleguen a los patios de dos familias, por lo que se ha transformado en un problema permanente”.

Los dirigentes precisaron que el malfuncionamiento de la planta ha afectado la calidad de vida de quienes viven frente a la planta y en la ribera del río por los olores que se propagan y la gran cantidad de moscas presente en la zona.

Los habitantes del área expresaron su preocupación incluso antes la construcción de la planta, ya que está ubicada a menos de cien metros de la salida a Valle Exploradores, lugar de gran atractivo turístico.

Junto con eso, los residuos industriales líquidos son evacuados al río Tranquilo, el cual desemboca a pocos metros del lugar donde estará la futura costanera y de donde los turistas se embarcan para ir a conocer las catedrales de mármol.

Solicitud de medidas

De esta manera, pidieron que quienes trabajen en la planta “tengan las competencias necesarias para operarla” y solicitaron una investigación que transparente cuales fueron los errores, además de establecer responsabilidades.

La carta fue enviada con copia a la Intendencia Regional, las seremis de Salud y Medio Ambiente, y al Servicio Nacional de Turismo.