El noble gesto ocurrió cuando un bus de la empresa Pullmann se detuvo en medio de un viaje entre Copiapó y Diego de Almagro, tras notar la presencia de un perro que deambulaba en un sitio deshabitado, con apariencia famélica.

Personal de la máquina se bajó para proveer al can de agua y alimento, a lo que el animal manifestó su bienestar moviendo la cola, pero sin tocar ni aproximándose demasiado a las personas.

Fue una joven, que iba como pasajera, quien grabó el emotivo momento y lo subió a sus redes sociales, al percatarse de lo que acontecía.

“Hoy venía viajando a Copiapó en la empresa Pullman Bus y a mitad de camino estaba este amiguito, los funcionarios no lo pensaron dos veces y no quisieron quedar indiferentes. Un gran gesto, faltan más personas como éstas”.

Se presume que, por el aspecto del can, se mantendría sin hogar ni responsables de sus cuidados.