Con el fin de estimular en sus actividades a los niños con Trastorno de Déficit de Atención Hiperactivo (TDAH), la Municipalidad de Arica instalará 117 “bicibancos” para 35 establecimientos de la comuna.
Los pupitres interactivos cuentan con pedales de bicicleta, para que los menores puedan realizar actividad física, a la vez que evitan distraer a otros compañeros o salir de la sala de clases.
La hiperactividad es entendida como una actividad excesiva e inapropiada, en relación tanto con la edad, como con la exigencia de la tarea, y el TDAH se presenta como la incapacidad para controlarla, según explica Fundación Cadah.
El “bicibanco” está compuesto por una mesa-pizarra de 60 cm de ancho y 45 cm de profundidad, una silla regulable con respaldo y transmisión de pedales regulable (resistencia al pedalear). Está hecho de acero con pintura electroestática de alta resistencia y superficie de madera.
El ambicioso proyecto “cumplirá con un protocolo de implementación, seguimiento y evaluación”, según señala la DAEM de Arica. Habrá testeos previos a cargo de kinesiólogos y profesores del Programa de Integración Escolar (PIE), quienes capacitarán a los docentes de cada curso que cuente con estos escritorios.
Además, durante el uso del pupitre se evaluará signos como “temperatura, sudoración, coloración del rostro, frecuencia respiratoria, hidratación, higiene, ritmo del habla, etc”.
Los “bici-bancos” fueron diseñados por un maestro canadiense e implementados con éxito en ese país y en Estados Unidos. Han sido vistos incluso como una alternativa a la medicación, según El Clarín.
Respecto a ello, la psicóloga Melissa Fonseca aclaró que funciona de forma complementaria al tratamiento integral y farmacológico, pues de trata de un desajuste a nivel neurológico que debe evaluarse de forma particular en cada paciente.
Promoviendo la inclusión
Valentina Fonseca, terapeuta ocupacional del Centro Inclusivo Inspira, valoró la implementación de los pupitres, pues “ayudarán a mejorar la hipotonía que afecta sus manos y pies, ejercitando y fortaleciendo sus músculos”.
Añadió que también mejora las habilidades de coordinación y equilibrio, favorable para los niños y el desarrollo de su motricidad fina, “el tomar control de su propio cuerpo, favoreciendo la disminución de la torpeza motora y aumentando su estabilidad corporal”.
Fonseca recalcó que será enriquecedor para los educadores, los niños y sus familias, pues optimizará su atención y concentración. Esto facilita sus habilidades cognitivas y sentido de autoeficacia, mejorando su autoestima, explicó a BioBioChile.
“Oportunidades como esta aportan al logro de la inclusión en nuestro país”, concluyó la profesional.
