La Policía de Investigaciones (PDI) de Arica desbarató una red de tráfico de cocaína que funcionaba en torno a las panaderías de la zona. Una de ellas era el centro de operaciones.
Según consignó El Mercurio, la droga era acopiada en un local y comercializada por narcotraficantes de la ciudad.
En esa panadería, además, camuflaban la cocaína con harina, para engañar a los policías en caso de allanamiento.
Pese a lo anterior, una indagatoria de la PDI permitió desbaratar la red de narcotráfico y detener a cuatro hombres. Dos de ellos trabajaban de panaderos, de 24 y 39 años de edad.
Las sustancias ilícitas incautadas estaban en medio de hallullas y usleros, en un mesón que servía para distribuirla en gramos.