En el marco de la actualización del Plan Regulador Comunal organizada por la Municipalidad de Antofagasta, se realizó la octava Mesa Técnica de Desarrollo Urbano, con el borde costero como tema principal.

En la oportunidad, expuso el Premio Nacional de Arquitectura 2014, arquitecto y paisajista de la Universidad Católica de Chile, Teodoro Fernández, quien señaló que “debemos dar un marco a las futuras inversiones en el borde costero, en donde lo fundamental es saber cómo hacer que los ciudadanos de Antofagasta tengan un acceso al goce del borde costero y, al mismo tiempo, protegerlo de las agresiones ciudadanas”.

Por su parte, la alcaldesa Karen Rojo manifestó que “en Antofagasta tenemos cerca de 40 Km. de costa y la verdad es que poco se ha aprovechado, ya sea por falta de inversión o por las condiciones y limitaciones que existen para poder construir en gran parte de estos paños”.

Por lo mismo es que la autoridad comunal destacó el desarrollo de importantes proyectos que se concretarán en el periodo 2018-2019.

“Por una parte, tenemos el mejoramiento del sector de Las Almejas, que involucra la intervención de 12 mil mt2 con máquinas de ejercicios, juegos infantiles y el aumento de áreas verdes; el Distrito Cultural La Chimba, un espacio urbano de gran impacto para Antofagasta, con la construcción de cerca de 50 mil mt2, centros comerciales, áreas de recreación, servicios públicos y espacios cívicos. Un gran proyecto que sin duda cambiará la forma en que conocemos Antofagasta”, relató Rojo.

Y agregó que “además, se complementará con la construcción de la playa La Chimba, un proyecto esperado durante décadas y que recientemente obtuvo el visto bueno para su licitación con el RS de Desarrollo Social. Un proyecto de 22.867 mt2 que entregará un entorno completamente nuevo al sector y un uso más familiar y turístico””.

En conclusión, junto al mejoramiento y la construcción de infraestructura que permita acceder a estas obras, se debe lograr una verdadera integración. Por ello los expertos concordaron en fortalecer el acercamiento, de tal manera que desplazarse de cerro a mar sea un agrado y no un impedimento.