Fue uno de los centros de detención y tortura durante la dictadura en Antofagasta. Actualmente, diversas unidades de Carabineros hacen uso del inmueble, sin embargo, una placa lo reconoce como Monumento Nacional y Sitio de la Memoria Histórica.

Una actividad, en el marco de la conmemoración del Día Nacional del Patrimonio, representó un hito en la ciudad, ya que este lugar fue utilizado -por los órganos de inteligencia, durante la dictadura de Pinochet- para aprisionar y torturar a sus enemigos políticos, muchos de los cuales fueron ejecutados durante el paso de la denominada Caravana de la Muerte.

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Luego de 43 años abrió sus puertas por primera vez al público, en una instancia que contó con ex presos políticos, familiares de detenidos desaparecidos, autoridades e integrantes de la Agrupación por la Memoria Histórica Providencia Antofagasta.

Héctor Maturana, presidente de la agrupación, consignó al medio El Diario de Antofagasta que “esta placa representa la declaratoria de que este recinto es un sitio de memoria, independiente de que ahora esté siendo ocupado por Carabineros. Hoy el lugar es patrimonio de todos y entrar al lugar, después de 43 años, también es un hecho histórico”.

La esperanza de un lugar público

Pese a que actualmente es utilizado por Carabineros, desde la agrupación esperan que el recinto les sea traspasado por la Intendencia, y así sea empleado como recinto cultural e histórico, aunque eso signifique trasladar las dependencias actuales de los efectivos policiales a otro edificio.

Maturana declaró al medio que, existe la voluntad política por parte de las autoridades locales para avanzar en la recuperación de este espacio, de manera que pueda contribuir de mejor forma a la preservación de la memoria, y la defensa de los derechos humanos en la región.