El ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés, informó a través de un comunicado que el veto presidencial de la Reforma Laboral comenzará a tramitarse en el Congreso con discusión inmediata a la brevedad, a fin de aprobarlo y poder promulgar la ley.

“Habría quedado más tranquilo en otro escenario, pero para eso necesitábamos el concurso de la oposición y no lo tuvimos”, aseguró el secretario de Estado tras participar en el Comité Político de los lunes en La Moneda.

El titular de Hacienda manifestó que hubiera preferido llegar a un acuerdo, pero no podrían tener una reforma constitucional y pactos de adaptabilidad.

Consultado respecto a la posibilidad de reponer los pactos de adaptabilidad, el jefe de las finanzas públicas precisó que “el problema de esto es que cualquier cosa que hagamos, más allá del veto y la promulgación, encuentra un camino complejo, que es ponernos de acuerdo en la preminencia de los sindicatos en algunos temas”.

En este sentido, explicó que “la titularidad, que es una preminencia mucho más general, prácticamente total, es un deseo de la Nueva Mayoría; cero preminencia es la postura de la oposición, y por lo tanto cualquier cosa que hagamos puede terminar en el Tribunal Constitucional”.

Así, dijo, “es un camino que nos parece complejo, por eso la decisión de la Presidenta de tramitar el veto y no enviar un proyecto de ley corta, porque ese proyecto de ley corta se va a encontrar con dificultades que lo hacen prácticamente imposible en su trámite, a no ser que nos pongamos de acuerdo con la oposición respecto de una visión del rol de los sindicatos. Ellos no han estado dispuestos a converger en esto”.

Consultado por las críticas de la oposición por apoyar un veto que elimina algunos pactos de adaptabilidad, comentó que el fallo del Tribunal Constitucional “nos dejó una reforma que no es perfecta y sí es perfectible, pero para ese perfeccionamiento necesitábamos a la oposición y, por razones que a mí me cuesta entender plenamente, la oposición no quiso establecer un diálogo constructivo para cómo solucionar esos temas”.

Asimismo, Valdés descartó que esté pensando en renunciar a raíz de este episodio. “No, no pienso renunciar. Estoy trabajando fuerte, no tendría por qué renunciar tampoco por el veto”. Recordó que el veto se decidió en conjunto sin conocer el fallo.

“Después pusimos mucho esfuerzo con el ministro Eyzaguirre, la ministra Rincón, incluido el ministro Díaz, en tratar de encontrar una salida con la coalición y con la oposición. En la coalición encontramos bastante apoyo (…) pero no logramos lo mismo con la oposición y por lo tanto no se puede hacer. Y si no se puede hacer, bueno, hay que ya cerrar este capítulo y moverse a nuevas cosas”, enfatizó.