La justicia condenó al alcalde de Talcahuano, Gastón Saavedra, a pagar más de 50 millones de pesos por concepto de deudas impagas en el marco de su última campaña municipal.

El fallo, al que tuvo acceso exclusivo Radio Bío Bío, indica que Saavedra debe pagar $50.412.745 esa cifra a la empresa de publicidad Big Marketing por una serie de facturas impagas que el demandante logró acreditar ante el Primer Juzgado Civil de Talcahuano.

Sin embargo, la condena detalla también que a esta cifra se deben restar 10 millones de pesos, los que ya fueron abonados por el demandado.

Big Marketing fue contratada por Saavedra en 2012 para elaborar la propaganda para su candidatura a la reelección y las facturas fueron rendidas al Servel como gastos de campaña. Debido a que no se alcanzó un acuerdo, este viernes el tribunal dictó la sentencia.

José San Martín, abogado de la empresa, explicó esta condena e incluso aseguró que se intentó llegar a un acuerdo con Gastón Saavedra pero éste, en su minuto, negó la deuda: “En primera instancia, nosotros presentamos una gestión preparatoria, que es de reconocimiento de deuda. El señor Saavedra compareció en tribunales pero negó la deuda, en la cual pudimos acreditar, con los documentos acompañados, entre otros declaración de gastos en Servel, que efectivamente se adeudaban a mi representado estas cantidades”.

Sorprendido y también molesto reaccionó el alcalde de Talcahuano al ser consultado por esta condena, ya que aseguró que se “enteró por la prensa”.

“A mí todavía no me han comunicado nada, me han comunicado a través suyo nomás. Me estoy enterando por la prensa. Es una deuda que es particular, de un juicio que se arrastra hace bastante tiempo porque teníamos una discrepancia respecto del monto que se me estaba cobrando. Yo lo que dije es que lo que estaba cobrándome no era, e insisto que no es ese monto, sino que es un monto menor“, afirmó la autoridad.

El alcalde agregó que va apelar ante la Corte de Apelaciones, ya que insistió en que el monto que se le esta cobrando “no es justo”, e insistió en la supuesta “mala intención” de la prensa al publicar este tipo de fallos.