Durante esta jornada comenzó la recolección de firmas por parte de apoderados del Instituto Nacional, para que los estudiantes movilizados depongan la toma de las dependencias, la que se prolonga por casi dos meses.

La idea, comentaron, es solicitar a la Contraloría que se haga cargo por un supuesto abandono de deberes por parte del rector Fernando Soto y de la alcaldesa de Santiago, Carolina Tohá, para que cuanto antes se reanuden las actividades académicas.

Además, los apoderados criticaron a los estudiantes movilizados pues consideran que la toma de las dependencias no los beneficia en las demandas que han expresado.

Todo en medio de un álgido ambiente sobre los presentes que atraviesan la educación superior y universitaria.