La Comisión Seguridad de la Cámara de Diputadas y Diputados, pospuso la votación del artículo uno del proyecto que crea el Ministerio de Seguridad Pública, pese a que el Gobierno llegó con un acuerdo transversal de una mesa de asesores de la comisión.
Efectivamente, la comisión definió hace semanas un equipo de asesores que debía llevar una fórmula de consenso, definiendolas funciones, obligaciones y facultades de la nueva institucionalidad.
Piden más eficacia, más definiciones ejecutivas, más simpleza. Esto, porque la propuesta de tres párrafos ocupa conceptos como la interoperabilidad y la interagencialidad y da énfasis a la coordinación con otros ministerios y la promoción de los Derechos Humanos.
Para el diputado RN, Diego Schalper, el artículo debe dejar claro que la nueva autoridad debe tener ‘poder de mando’.
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El diputado socialista Raúl Leiva, hizo un enérgico cuestionamiento a la fórmula -presentada por el jefe jurídico del Ministerio del Interior, Rafael Collao– enfatizando en que el poder del ministerio dependerá siempre de la voluntad política del gobierno de turno y apuntando que no es necesario reiterar funciones propias de todos los ministerios.
Alejandra Placencia, diputada del Partido Comunista, defendió la redacción presentada y dijo que solo deben hacerse ‘algunos ajustes’ para llegar a una fórmula de consenso.
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La llamada ‘bajada regional’ sigue siendo tema, respecto a qué expresión tendrá en los territorios, qué nombre tendrá la autoridad, el poder que tendrá para hablar con las autoridades policiales de cada zona.
Andrés Jouannet, diputado de Amarillos, detalló todos los aspectos que deben ser definidos, ironizando con la posibilidad de que termine creándose un ‘seremi de seguridad’.
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El proyecto está con urgencia de Discusión Inmediata, por lo que los tiempos son cortos.
La comisión acordó invitar a todos los exsubsecretarios del interior que estén disponibles para analizar el proyecto, dejando en claro que ningún acuerdo entre asesores tiene más fuerza que un acuerdo entre parlamentarios.