La presidenta del Senado, Adriana Muñoz (PPD), señaló que antes de votar el TPP-11 es necesario abrir un espacio de diálogo y reflexión en torno a la materia, de acuerdo a la propuesta de sus colegas.
Lo anterior lo indicó pese a su firme postura de no poner en tabla el cuestionado tratado.
Ella había manifestado su rechazo a la urgencia puesta por el Ejecutivo, calificada de “discusión inmediata”.
Sin embargo ayer, y tras una reunión con la mesa de la corporación, el Gobierno bajó la urgencia y la calificó de “suma”.
Esto significa que de seis días que entrega el Presidente a la tramitación del proyecto, ahora ese periodo se amplía a 15.
Pese a que su visión es clara, Muñoz sostuvo que es necesario discutir respecto al fondo del proyecto.
El Ejecutivo – tal y como se había indicado anteriormente – señaló que una de las prioridades de la agenda es el TPP-11.
No obstante, el subsecretario de la Secretaría General de la Presidencia, Máximo Pavez, indicó que de todas formas están abiertos a escuchar los requerimientos de la oposición.
Se espera que el tratado no sea tramitado durante enero. Esto ya que desde La Moneda se comprometieron a priorizar la agenda de seguridad en estos últimos días de trabajo legislativo, antes del receso estival.
La iniciativa es mirada con ojos negativos por parte de un grupo opositor. Se señala, en lo concreto, que el tratado cuenta con aspectos que podrían perjudicar gravemente la protección de ciertos elementos y productos, como las patentes, las semillas y los fármacos.
