Con arraigo nacional y firma semanal quedó Nicolás Zepeda, único sospechoso del crimen de Narumi Kurosaki en Francia.

Estas medidas cautelares fueron decretadas la tarde de este jueves -en una audiencia realizada por videoconferencia- a petición de la Fiscalía, ya que la semana pasada el ministro de la Corte Suprema, Jorge Dahm, acogió su solicitud de extradición, que ahora deberá resolver la Segunda Sala del máximo tribunal, tras la apelación de la defensa de Zepeda.

Francia lo acusa de “homicidio voluntario con premeditación” en contra de la ciudadana japonesa de 21 años y de haber escondido su cuerpo de manera tal que no fuera encontrado.

Ambos mantuvieron una relación sentimental de casi un año, pero después de su separación y de mantenerse distanciados, ella había iniciado un nuevo noviazgo con un estudiante francés.

Esa nueva relación de la joven habría detonado los celos de Nicolás Zepeda, quien habría viajado especialmente desde Chile para cometer el crimen, de acuerdo a la investigación de la justicia de Francia.

Hasta el momento persiste el misterio respecto de la ubicación del cuerpo de Kurosaki.

El juicio de extradición se inició el 5 de marzo, tres meses después de que Chile recibiera el pedido formal por parte de la justicia francesa.

Durante los alegatos de extradición, la justicia francesa dio a conocer pruebas que dan cuenta de que Zepeda compró material inflamable y siguió varios días a la víctima.

La noche del crimen, el sospechoso la invitó a comer y luego se fue con ella hasta la vivienda estudiantil en Besançon, donde la habría asfixiado estrangulándola, luego habría metido su cuerpo en una maleta, que habría escondido posteriormente en un bosque cercano. Después habría realizado varias acciones para encubrir el delito.

El chileno había amenazado a la víctima en un video publicado en internet, que luego retiró.

El sospechoso admitió que estuvo con la joven la noche de su desaparición, pero ha negado toda responsabilidad en el caso.

Este artículo describe un proceso judicial en curso
Existe la posibilidad de que los cargos sean desestimados al finalizar la investigación, por lo cual NO se debe considerar al o los imputados como culpables hasta que la Justicia dicte sentencia en su contra.
(Artículo 04 del Código Procesal Penal)