El pasado 13 de diciembre, Carlos Eugenio Lavín y Carlos Alberto Délano terminaron de acudir a sus clases de ética en la Universidad Adolfo Ibañez, luego de que los controladores del grupo Penta fueran condenados por delitos tributarios.

Ambos empresarios fueron sentenciados en julio de 2018 a cumplir cuatro años de presidio, con beneficio de libertad vigilada intensiva por cometer dichos delitos de forma reiterada. Además, se les inhabilitó de por vida para ejercer cargos y oficios públicos mientras duren las condenas, además del pago de una multa de más de 857 millones de pesos. Esto, luego de que llegaran a un acuerdo con el Ministerio Público.

A esto se sumó otra medida que fue ampliamente criticada. Délano y Lavín tenían que ingresar un programa formativo de ética enfocado en la dirección de empresas, y desde Gendarmería determinaron que tenían que acudir a 33 horas en total.

Según informó el medio La Tercera, los empresarios no faltaron a ninguna de sus clases, aunque sí pidieron poder ausentarse a una de las lecciones, lo que no fue autorizado.

Tras culminar el programa, la universidad emitió su informe con los resultados y avances de los “estudiantes”, el que será remitido al tribunal y se encuentra bajo reserva por orden de la Corte.

Por este curso, los controladores debieron dedicar horas extra para estudiar, ya que uno de ellos no manejaba a cabalidad el inglés, por lo que no podía leer textos de filosofía avanzada.

El curso tuvo un costo de 30 millones de pesos, el que por orden judicial, debían pagar de su bolsillo y no por alguna empresa. El programa se dividió en tres partes: una ligada a estudios de filosofía (70%); otra vinculada al aspecto ético empresarial (20%); y la tercera dimensión respecto de asuntos legales (10%). Para ellos, tres facultades debieron converger en el curso impartido por UAI: Artes Liberales, Negocios y Derecho.

Finalmente Délano y Lavín están con libertad vigilada con un trabajo psicológico y asistentes sociales que deben revisar aspectos de rehabilitación por el delito cometido, algo que también es parte de la condena.