Carabineros entregó su propio informe sobre la composición del líquido del carro lanzaaguas, reporte realizado por el Laboratorio de Criminalística en el que se expusieron fotografías, se identificaron las máquinas que fueron parte de las muestras y en el que se descartó el uso de soda cáustica.

La prueba fundamental fue la medición del pH del líquido extraído, que según el estudio resultó ser pH 6, muy cercano al neutro que es 7, descartando así la existencia de ácidos o bases fuertes.

Lo anterior, tras el estudio dado a conocer por el Movimiento Salud en Resistencia (MSR), que acusó la presencia de soda cáustica en este líquido y cuyos procedimientos fueron cuestionados.

Carabineros también realizó un informe sobre ese documento, donde cuestionó el origen del muestreo y la metodología además de los resultados. También acusó plagio de párrafos textuales obtenidos de internet.

El general director, Mario Rozas, no descartó emprender acciones legales en contra del Movimiento Salud en Resistencia.

El Gobierno salió a respaldar a Carabineros e incluso instó a ofrecer disculpas. Así lo manifestaron la vocera de La Moneda, Karla Rubilar; y el ministro de Salud, Jaime Mañalich.

Ante los cuestionamientos, José Silva, coordinador y vocero de MSR, defendió el estudio de la institución e invitó a quienes lo cuestionan a poder hacer estudios propios a las muestras que utilizaron para el análisis.

La presidenta del Colegio de Químicos Farmacéuticos, Ana Victoria Nieto, en entrevista con el Expreso Bío Bío, valoró que se ponga la alerta sobre la existencia de químicos dañinos porque lo innegable, dijo, es que existen personas que resultaron heridas tras ser rociadas con el carro lanzaaguas.

El Ejecutivo, además, solicitó a la Universidad Católica un estudio externo sobre la composición del líquido utilizado como elemento disuasivo.