En su llegada a Punta Arenas, el ministro de Defensa, Alberto Espina, se refirió a los hallazgos del Hércules C-130 que estaba siniestrado desde el lunes con 38 pasajeros en La Antártica y se comprometió a colaborar con la Fiscalía para investigar las causas del trágico accidente.

Tras reunirse con los familiares de la tripulación que aún se encuentra en Magallanes, afirmó que es “dramático comprobar el dolor, la angustia que los aflige y la comprendemos absolutamente. Solidarizamos con ellos y nos llega en el alma que 38 compatriotas estén afectados por la desaparición de un avión de la Fuerza Aérea de Chile”, afirmó.

De igual forma, reiteró que desde un comienzo la FACH como el Gobierno se comprometieron a utilizar todos los recursos humanos y materiales para localizar el avión. Labores en las que han trabajo 23 medios aéreos, 14 medios navales y 11 agencias internacionales con capacidades satelitales.

Asimismo, agradeció a los países que apoyaron en la búsqueda.

Respecto a la reunión que mantuvo con el fiscal regional, Eugenio Campos, con el que se comprometieron a entregar toda la ayuda para que se esclarezcan las causas del accidente.

Para eso, se definieron tres principios la colaboración, transparencia y coordinación:

“Cuando mueren 38 compatriotas, colaborar no es un favor, es un deber (…) porque los familiares y el país necesitan saber exactamente qué fue lo que ocurrió; en segundo lugar, con total transparencia y en tercer lugar, con la información que exista en esta materia se ha producido una coordinación entre la Fuerza Aérea y el fiscal, con el propósito de agilizar la investigación”.

Para cerrar, reforzó que “nuestro deber es en primer lugar encontrar todos los hallazgos, antecedentes y restos del avión, hacer todo lo humanamente posible para que no quepa ninguna duda de lo que ocurrió en ese accidente y (…) ser muy solidarios con los familiares porque están sufriendo algo que es realmente dramático”.