Por segundo día consecutivo, y por casi seis horas, el excomandante en Jefe del Ejército, Humberto Oviedo, declaró ante la ministra de la Corte Marcial, Romy Rutherford, por la investigación que lidera hace casi tres años por el fraude en la institución castrense.

Caso que tiene su origen en el cuaderno rotulado “proveedor Raúl Fuentes Quintanilla”, donde se habrían desviado fondos desde la Ley Reservada del Cobre para pagar servicios inexistentes.

Sin embargo, respecto a las aristas -que son más de 20 a la fecha-, que involucran directamente al general en retiro son las relacionadas a la malversación de caudales públicos por alrededor de $4.500 millones -por lo que ya fue procesado-, y la de “empresas de turismos”.

Esta última indagatoria fue la que Oviedo intentó intentó frenar presentando un recurso al Tribunal Constitucional.

Tras el fin de la diligencia de este viernes, el excomandante en jefe salió del despacho de la ministra Rutherford sin hacer declaraciones.

Sin embargo, fuentes relacionadas a Oviedo sostuvieron que después de las Fiestas Patrias se podría retomar el interrogatorio.

El abogado defensor del general en retiro, Marcelo Castillo, enfatizó que su representado no cometió ningún hecho punible, que está colaborando y está tranquilo.

El parlamentario y presidente de la Comisión de Defensa Nacional de la Cámara de Diputados, Jorge Brito, hizo un llamado a dejar la hipocresía y empezar a colaborar.

“Yo creo que ningún funcionario público estaría tranquilo sabiendo que el presupuesto fiscal está financiando sus vacaciones de verano. Creo que en esto hay que dejar de lado la hipocresía y hay que comenzar a colaborar”, dijo.

“Uno se pregunta hasta cuándo se puede negar lo innegable. Lo que es cierto también es que esto es una práctica de un grupo del Ejército”, añadió.