La Corte Suprema desechó definitivamente el recurso de protección del suspendido fiscal regional de O’Higgins, Emiliano Arias, con el que pretendía retomar sus funciones. El lunes por la mañana además prestó declaraciones en el sumario administrativo que se sigue en su contra como presunto responsable de tráfico de influencias.

Ayer la tercera sala del tribunal máximo del país, en fallo unánime, declaró inadmisible el recurso de protección que interpuso la defensa del persecutor.

En el libelo se denunciaba una supuesta indagatoria parcial en su contra y la eventual medida arbitraria e ilegal de la suspensión en su cargo, que dictó el fiscal nacional el pasado 6 de mayo.

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(En el proceso administrativo) se ha corroborado las denuncias falsas, en comparación con otros antecedentes de la investigación, como por ejemplo las declaraciones de otras personas.
- Fiscal Emiliano Arias

“Que de la lectura del libelo de autos aparece de manifiesto que no se han mencionado hechos que puedan constituir la vulneración de garantías de las indicadas en el artículo 20 de la Constitución Política de la República, por lo que no puede ser acogido a tramitación, como se resolvió en su oportunidad”, dice la resolución, que confirma lo dispuesto por la Corte de Apelaciones de Santiago el pasado 13 de mayo.

El fiscal Arias está bajo dos investigaciones, una administrativa y otra penal. En concreto, se cuestionan sus actuaciones en la investigación por corrupción en la Corte de Apelaciones de Rancagua, el caso Caval, la indagatoria por malversación en el Teatro Regional de Rancagua y la filtración de información sobre un caso que involucraría a un sobrino suyo.

Las acusaciones en su contra las presentó el fiscal jefe de la unidad de alta complejidad de Rancagua, Sergio Moya, el 23 de abril, y luego Marcia Allende, exintegrante de esa unidad que trabajó en casos como Caval y las irregularidades en las listas de espera GES.

En tanto, Arias afirmó que las “las denuncias son falsas” tras salir del edificio de la Fiscalía Nacional donde declaró por dos horas ante el fiscal regional de Antofagasta, Alberto Ayala, a cargo del proceso disciplinario.

Arias aseguró que tanto en la indagatoria penal como administrativa se está comprobando lo inverosímil de los hechos denunciados por sus subalternos.

“(En el proceso administrativo) se ha corroborado las denuncias falsas, en comparación con otros antecedentes de la investigación, como por ejemplo las declaraciones de otras personas. Cuando esto avance se va a seguir corroborando que esto es una denuncia falsa en mi contra”, resaltó Arias.

Uno de sus abogados, Roberto Garrido, no descartó presentar querellas contra los denunciantes de Arias una vez que finalicen los procesos.

“No lo estamos descartando, pero queremos que las instituciones actúen, en este caso el Ministerio Público”, declaró Garrido.

Por su parte, terminada la diligencia el fiscal Ayala evitó entregar detalles, amparándose en la reserva de los antecedentes.

El interrogatorio de Arias sería una de las últimas diligencias de Alberto Ayala, que tiene un plazo máximo de 60 días para resolver si propone sanciones o absolver al persecutor regional de O’Higgins, sugerencia sobre la que deberá resolver el fiscal nacional, Jorge Abbott.