En su cuenta pública desarrollada este viernes, la directora del Servicio Nacional de Menores (Sename), Susana Tonda, confirmó el cierre de cuatro Centros de Reparación Especializada de Administración Directa (Cread), entre ellos, la residencia Galvarino en la que en abril de 2016 murió la menor Lissette Villa.
A este caso se le atribuye el haber destapado la crisis al interior del Sename, luego que posteriormente se conociera que más de mil menores murieron mientras estaban a cargo del Estado.
En la instancia que se llevó a cabo esta jornada participaron también el ministro de Justicia y Derechos Humanos, Hernán Larraín, quien llamó al Congreso a acelerar los trámites legislativos para los proyectos que dividen al Sename.
En la instancia, una decena de trabajadores subcontratados del Sename interrumpieron y funaron la actividad exigiéndole a la autoridad que se haga cargo de mejorar sus condiciones laborales. Con gritos, panfletos y lienzos, los funcionarios obligaron a terminar, de forma anticipada, la cuenta pública.
El director del sindicato metropolitano de la Oficina de Protección de Derechos, organismo dependiente del Sename, Luis Santibañez, pidió al Ministerio de Justicia que los reciba para abordar sus exigencias.
Producto de esta interrupción, las autoridades presentes debieron salir por pasillos laterales para evitar encontrarse con los trabajadores.
Más tarde, Susana Tonda aclaró que los funcionarios que se manifestaron no dependen del Servicio Nacional de Menores, sino que a organismos colaboradores. Sin embargo, dijo que este incidente refleja la crisis del Sename.