Esta semana, el Gobierno enviará una Ley corta en el marco de la reforma a la Ley Antiterrorista que se encuentra en el Congreso desde abril de 2018.

Aquello con el objetivo de acelerar la tramitación de la iniciativa que todavía atraviesa su primer trámite legislativo en la Comisión de Constitución del Senado.

De acuerdo a La Tercera, la decisión se habría tomado hace algunos días y la nueva medida estaría circunscrita a “nuevas técnicas especiales de investigación”, a modo de perseguir conductas consideradas terroristas.

En concreto, el Ejecutivo busca modificar el Código Procesal Penal para entregarles mayores herramientas a los fiscales y que actúen como se hace en el combate del narcotráfico y el lavado de dinero.

En esa línea, se pretende introducir a los agentes encubiertos y reveladores, sumado a las entregas vigiladas. El proyecto también autoriza que las comunicaciones sean interceptadas.

“Dada la necesidad de poder contar con instrumentos investigativos más eficaces, como los que tiene la Ley de drogas, el Presidente Piñera ha decidido dividir el actual proyecto en trámite y enviar un proyecto solo con las modificaciones para incorporar en la actual Ley las medidas investigativas especiales del Código Procesal Penal”, dijo a La Tercera el ministro del Interior, Andrés Chadwick.

No obstante, desde la misma cartera aseguraron que el nuevo proyecto corresponde al 5% del que ya se encuentra en trámite, medida que seguirá su curso actual.

Así, desde La Moneda aseguraron que desean continuar con el debate. Al ser minoría en el Parlamento, se requiere de la oposición para lograr la reforma.

Chadwick, al menos, se manifestó optimista al respecto. A su juicio, sería difícil para algún sector parlamentario “oponerse a un proyecto de sentido común e igualdad en el combate a las organizaciones criminales”.

La decisión del Gobierno se habría gestado en medio de presiones políticas realizadas especialmente por la UDI.