La Asociación de Profesionales de Secretaría del Senado cuestionó la designación del fiscal regional Metropolitano Sur, Raúl Guzmán, como secretario general de dicha instancia, pues “carece de experiencia legislativa”.

Lo mencionado por la asociación se da de cara a la votación del próximo martes 16 de abril por la nominación de Guzmán, quien fue seleccionado por la unanimidad de los comités parlamentarios. Éste requiere de dos tercios de los senadores en ejercicio, es decir 29 votos, para ser electo.

Mediante una declaración pública, la agrupación aseguró que la decisión es “errada e inconveniente”, argumentando que es imprescindible que quien dirija la instancia “tenga un manejo cabal de la normativa y de las prácticas parlamentarias que rigen la marcha de la Corporación”.

“Quien sea designado secretario general debe cumplir con estas exigencias y no verse expuesto a cuestionamientos públicos acerca de su idoneidad, prescindencia política e ideología y preparación legislativa”, añadieron.

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Esta crítica fue refrendada por el senador Alejandro Navarro, quien aseguró que la nominación de Raúl Guzmán rompe la tradición de designar a alguien que asegure imparcialidad. Además, indicó que la decisión de los comités es un acuerdo político del cual él no forma parte.

La opción de Raúl Guzmán, que dejó en el camino a otros tres postulantes entre ellos la exsubsecretaria de Hacienda Macarena Lobos y los abogados de comisiones del Senado Julio Cámara y María del Pilar Silva; ha sido interpretada como un intento de blindaje judicial por parte de la Cámara Alta.

En este sentido, el presidente del Senado, Jaime Quintana, descartó que Raúl Guzmán haya comprometido una “relación fluida con el Ministerio Público”, en el marco de una de sus exposiciones ante la comisión de Régimen Interno.

Para ser electo por la sala del Senado, Raúl Guzmán debe contar con 28 votos, es decir 2/3 de los senadores en ejercicio, respaldos que estarían ya comprometidos en virtud del acuerdo político alcanzado entre los comités parlamentarios, lo que permitiría al fiscal metropolitano sur percibir a partir de mayo una de las remuneraciones más altas del Estado, que en el caso del Senado supera los $17 millones mensuales.