Los presidentes de la Cámara de Diputados y del Senado, Iván Flores y Jaime Quintana respectivamente, reafirmaron su posición de no asistir a la recepción en honor al presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, a efectuarse en La Moneda durante la visita del mandatario extranjero a Chile.

Argumentaron que su decisión se ve reforzada por los dichos de Onyx Lorenzoni, jefe de gabinete de Jair Bolsonaro en Brasil, quien alabó la política económica de la dictadura que lideró Augusto Pinochet entre 1973 a 1990.

Lorenzoni destacó que la administración de Pinochet sentó las bases económicas que han dado éxito a Chile, pese a que el país sufrió un “baño de sangre” durante el “gobierno militar”, argumentando que de todas las administraciones de izquierda que le sucedieron “ninguno cambió esas bases macroeconómicas”.

Las declaraciones fueron mal recibidas por el diputado DC Iván Flores, quien afirmó que “no solamente me parece que es una afrenta a todas las personas que perdieron familiares, a toda la gente que sufrió la violación a los DDHH, sino que además es un desatino que no tiene parangón y yo creo que no se ha dado una circunstancia parecida”.

“No solamente no tienen justificación alguna, sino que merecen la más enérgica condena”, afirmó, asegurando que la declaración “justifica y ratifica la decisión que hemos tomado, y no tiene que ver con nuestra posición frente al gobierno chileno, es un tema exclusivamente con los dichos del presidente Bolsonaro y hoy día ratificado por uno de sus más cercanos, que además ocupa un lugar importante en su gobierno”.

“Pese a que no hemos recibido invitación, si la recibiésemos ahora con mayor razón no participaríamos de esa reunión”, sostuvo.

Esta postura fue compartida por el senador PPD Jaime Quintana, quien acusó que sus dichos son “un agravio al país entero” y defendió que “siendo muy dolorosas estas declaraciones, yo creo que no hacen otra cosa que reafirmar la decisión que hemos tomado junto al presidente de la Cámara de Diputados”.

Recordó que la decisión “no tiene nada que ver con un gesto inamistoso al pueblo brasileño, todo lo contrario (…) Brasil es el primer país destino de las inversiones chilena, quinto país destino de las exportaciones, hay un intercambio cultural y hay una relación diplomática que nosotros incluso estamos por fortalecer”.

“Aquí hay un cuestionamiento a la figura del presidente Bolsonaro, cuya legitimidad no estamos poniendo en cuestión, pero sí su principio, su discurso, su forma de actuar en política se aparta mucho de lo que cree una parte importante de los chilenos”, argumentó. “Creo que sería un agravio al mundo que ha sido discriminado, a las mujeres cuando veo que hay un mandatario aquí que no cree en la igualdad de oportunidades, que cree en la tortura, que está contra las minorías sexuales, contra el mundo indígena. Yo creo que sería no reconocer la diversidad de Chile que nosotros nos prestemos para un homenaje como el que se pretende hacer los próximos días a Bolsonaro”.

Ambas autoridades recordaron que esta jornada asistieron a un encuentro con el presidente Piñera y el mandatario colombiano Iván Duque, con quien tampoco comparten ideologías, pero reconociendo que éste maneja su política exterior sin atropellar los estándares democráticos internacionales.