Dieciséis años lleva recluido en la Penitenciaría Federal de Mossoró, en Brasil, el exfrentista Mauricio Hernández Norambuena, conocido como “comandante Ramiro”, por el secuestro del empresario local, Washington Olivetto.

El sacerdote jesuita, Felipe Berríos, solicitó a través de un video difundido en redes sociales, el 13 de septiembre, que el exguerillero cumpla su condena en Chile.

Berríos aseguró que las condiciones de reclusión de Norambuena en Brasil son inhumanas.

Desde la UDI, el alcalde de Las Condes, Joaquín Lavín, afirmó que todos los autores del crimen del fundador del gremialismo, Jaime Guzmán, deben cumplir condena en territorio nacional.

El sacerdote realizó un llamado a la ciudadanía a informarse debidamente, leyendo el libro “Un Paso Adelante”, de Hernández, para tener un opinión justa sobre la condena del exlíder del Frente Patriótico Manuel Rodríguez.