El fiscal regional de Aysén, Carlos Palma, quien lidera las indagatorias por el fraude al interior del Ejército, confirmó que esta semana llevó a cabo diligencias en dependencias del Cuartel General de la institución en Santiago.

Hasta el lugar accedió junto a personal de la Policía de Investigaciones para recabar entre otros antecedentes: documentación, datos almacenados en computadores y correos electrónicos referida a información financiera.

Actualmente son 109 los funcionarios activos y en retiro que están siendo investigados, tras la denuncia de la Contraloría, por un desfalco que supera los 300 millones de pesos por hechos correspondientes a los años 2015 y 2016.

No obstante, esta cifra podría aumentar, así como el número de personas involucradas, ya que la investigación recabará antecedentes a partir de 2011.

Así lo indicó el fiscal Palma, quien señaló que en las diligencias efectuadas este miércoles en Santiago, se obtuvo información importante para el desarrollo de la causa.

Las indagatorias buscan aclarar si exintegrantes de esta rama de las fuerzas armadas cometieron el delito de fraude al fisco cuando se pagaron las deudas que se mantenían con suboficiales inscritos en el Fondo de Ayuda Mutua, que operó entre 1950 y 2006.

El comandante en jefe del Ejército subrogante,John Griffiths confirmó el desarrollo de la diligencia, la que remarcó, fue acordada entre la institución y el Ministerio Público y no se trató de un allanamiento, como había trascendido.

Pese a la reserva de la investigación, el Ejército entregó algunos documentos financieros relativos a la causa que se inició en marzo y por la que todavía no existen responsables ni personas formalizadas.

Según indicó El Mercurio, junto a estas diligencias, dos generales en retiro presentaron una querella, en este mismo caso, contra todos los que resulten responsables del delito de fraude al fisco, explicando que las responsabilidades estarían en los ex altos mandos de la institución.