Con una discreta ceremonia, el Gobierno promulgó la Ley de Universidades del Estado, tras la petición de los propios rectores de dichas instituciones, en dependencias de Conicyt.

Recordando el frío e impersonal momento que le tocó vivir al momento de titularse en la Universidad de Chile, el ministro de Educación, Gerardo Varela, inició su discurso con motivo de la promulgación de la esperada Ley, en una ceremonia humilde y sin ningún protocolo.

Contrario a lo que se ha sostenido siempre desde los planteles del Estado, el ministro de Educación indicó que la competencia que generó la creación de universidades privadas ayudó a mejorar la calidad que impartían las instituciones estatales.

Ante este análisis, el presidente del Consorcio de Universidades del Estado y rector de la Universidad de Chile, Ennio Vivaldi, indicó que para hablar del pasado reciente de estas instituciones sería necesaria una conversación más extensa.

El rector de la Universidad de Santiago, Juan Manuel Zolezzi, fue más directo y rechazó las palabras del ministro de Educación, junto con destacar que si no hubiera sido por ellos, la promulgación de la ley habría pasado sin pena ni gloria; tal como pasó con la Ley de Educación Superior.

La ceremonia, que no contó con la participación del presidente Sebastián Piñera, fue calificada como sobria por parte del vicepresidente ejecutivo del Consejo de Rectores y rector de la Universidad Valparaíso, Aldo Valle.

Recordemos que la entrada en vigencia de la Ley de planteles estatales supone la creación de un Consejo de Coordinación, establece un plan de fortalecimiento de 300 mil millones de pesos a diez años y para las 18 universidades, estipula la posibilidad de aumentar matrícula por sobre los límites que fija la gratuidad, y genera un marco común para la gobernanza institucional.