Los miembros del Sindicato Nº1 de la Minera Escondida señalaron que el Gobierno debería tener una participación activa en su rol como garante, para que se respete una eventual huelga legal establecida en la legislación.

Así lo comunicó el vocero de la organización, Carlos Allendes, luego de reunirse con el ministro del Trabajo, Nicolás Monckeberg, a quien le compartió su visión respecto a su contraparte en esta instancia. Dijo esperar cualquier cosa y no creer.

Además, aseguró que se encuentran preparados para enfrentar una eventual huelga, de la que dicen, se haría parte un universo del 97% de los trabajadores representados en el sindicato.

“Con la nueva reforma están prohibidos los reemplazos en huelga. No descartamos nada para defender nuestra fuente laboral”, advirtió.

Allendes señaló que, considerando el porcentaje de sindicalización que existe en la firma, la Reforma Laboral los beneficia, ya que al no existir reemplazo en huelga, la empresa vería paralizadas sus funciones.

Con respecto al petitorio, afirmó que existe un piso mínimo que está asegurado, en referencia a lo obtenido luego de los 44 días de huelga que sostuvieron a principios del 2017 y al contrato actual al que están suscritos, el cual vence el 31 de julio y tras el cual comenzaría el proceso de mediación.

Junto con ello, precisó que esperan un reajuste cercano al 5% y un bono de término de conflicto de un 4% de las utilidades de la empresa minera, lo que podría ascender a $25 millones. Sin embargo, aclararon que en términos porcentuales es menor al del 6,25% obtenido en la negociación del 2013.