Los partidos de la exNueva Mayoría están enfrentando importantes definiciones internas. Mientras en la Democracia Cristiana ya fueron establecidas las dos listas que se enfrentarán por el liderazgo de la colectividad, en el Partido Por la Democracia (PPD) el excanciller Heraldo Muñoz asoma como el candidato idóneo para el cargo, en desmedro del exdiputado Marco Antonio Núñez.

Lo anterior, pese a que en febrero pasado, al cierre del segundo mandato de Bachelet, se había descartado como opción para liderar su partido.

Aunque frente al cambio de escenario, el extitular de RREE recibió el inmediato apoyo del exministro y militante histórico del PPD, Sergio Bitar, quien admitió que apoyará la alternativa de Muñoz, ya que -en su opinión- tiene las capacidades para elaborar un proyecto estratégico del progresismo.

Eso sí, la alternativa de Marco Antonio Núñez también ha generado adeptos, tal como la diputada Loreto Carvajal, quien recalcó que el PPD necesita tener unas elecciones competitivas.

Aunque el plazo para inscribir candidaturas es más amplio que el de la DC, que terminó ayer viernes: los candidatos a la presidencia tienen hasta el 10 de mayo para inscribir las listas que competirán por el timón del PPD.

Las cartas DC en carrera

El exdiputado Fuad Chahín y el exgobernador de San Antonio, Humberto Burotto, son los candidatos a presidir la Democracia Cristiana de cara a las elecciones del próximo 27 de mayo.

Pero desde el partido asumen que el diputado Chahín será casi con seguridad el próximo presidente de la DC, considerando que la postulación de su competidor se gestó a última hora -de la mano de dirigentes de base identificados con el ala más progresista de la DC- para así hacer frente a la falta de conducción política de las anteriores directivas.

En tanto, la disidencia quedó fuera de carrera luego que no lograran instalar una propuesta propia y de paso desistieran integrar la lista de Chahín. Frente a ello, el diputado Gabriel Silber insistió en que la candidatura de Chahín es la que reúne la mayor cantidad de apoyo.

Ante dicho escenario, el senador Francisco Huenchumilla -que asomó como candidato para presentarse como alternativa disidente- se mostró contrario a tener dos listas, ya que “soslaya” los problemas de fondo de la colectividad.

Sea como sea, sólo queda esperar la definición que se concretará a fines de mayo y que dirimirá la nueva directiva de la Democracia Cristiana, cuya primera tarea será fijar la fecha del sexto Congreso Ideológico del partido.