A las 01:10 horas de este viernes aterrizó en Brasilia el presidente Sebastián Piñera acompañado de su esposa, Cecilia Morel, comenzando así la segunda parte de su primera gira internacional en este nuevo mandato.
Primero fue Argentina y ahora fue el turno de Brasil. El gigante sudamericano, con 207,6 millones de habitantes, es el tercer socio comercial de nuestro país, con 3.440 millones de dólares en exportaciones, aunque la balanza se inclina a favor de los brasileños, con 5.606 millones de la divisa estadounidense que reciben desde Chile, por ejemplo, por la venta de autos.
Es por esta razón, y al igual que el jueves en Argentina, es que buscar mejorar las barreras arancelarias y de intercambio entre ambos países se ha transformado en una prioridad para la recién asumida administración de Piñera.
Por esto es que en la capital carioca se firmaron una serie de documentos, entre ellos acerca de compras públicas e inversión en servicios financieros.
Además, se va a formalizar la negociación para validar un nuevo Tratado de Libre Comercio que reemplace el que rige en la actualidad.
También se van a activar instancias bilaterales en materia de seguridad local, energía, cooperación antártica y en cuanto a inteligencia artificial, biocombustibles y el corredor bioceánico. Educación e intercambio de los mismos también forman parte de los acuerdos alcanzados en la visita que sustancia Piñera.
El jefe de Estado habló y puso el énfasis en uno de los puntos que también destacó en su paso por suelo trasandino: la transmisión de datos entre las tres naciones para la protección en cuanto al ciberterrorismo.
Temas como éste y los anteriores se discuten cuando Brasil comienza a levantarse económicamente del estancamiento por el que atravesó, proyectando cuatro puntos de crecimiento para 2018.
Aunque su política sigue siendo noticia por los escándalos de corrupción que han golpeado gravemente al país y que terminaron con la salida de la presidenta Dilma Rousseff y que tienen en el ojo del huracán al actual mandatario, Michel Temer.
Sin embargo, y pese a esto, las palabras de buena crianza entre Piñera y su homólogo se escucharon en todo minuto.
Temer incluso subrayó que para su administración era un gesto que Piñera saliera de Chile y eligiera Brasil para su primera gira por el extranjero.
El Presidente encabezó un almuerzo brindado en su honor por su par en la sede de la Cancillería en el Palacio Itamaraty, en la capital brasileña.
Dentro de las actividades del día llamó la atención la invitación que Piñera le hizo a Temer para visitar la Antártica en noviembre, algo que también admitió hizo con Macri.
A las 16:00 horas, el jefe de Estado tiene pactada su última actividad oficial, tras lo cual abordará el avión presidencial y regresará a Santiago.
