En el marco de la 115 versión de la Conferencia Episcopal, el arzobispo de Santiago, Ricardo Ezzati fue consultado por la prensa respecto su polémica analogía hecha a propósito del cambio de sexo registral en el contexto de la ley de Identidad de Género.

“Más allá del nominalismo, hay que ir a la realidad de las cosas. No porque yo a un gato le pongo nombre de perro, comienza a ser perro”, dijo el pasado viernes.

Sin reconocer directamente su error, el monseñor dijo que sus palabras debían ubicarse “en verdadero contexto con lo que se ha dicho y lo que no se ha dicho”. “Yo lo que quiero reafirmar, y ya lo dije el domingo de Pascua, mi más amplio respeto a toda persona y la situación de toda persona, más allá de la diferencias y condicionamientos, todos somos personas, y como tal, sujeto de todos los derechos y respeto”, agregó.

Tengo que explicar, dijo Ezzati, “lo que significa el nominalismo, una corriente también de filosofía de pensamiento que consiste en poner nombres que no siempre responden a la realidad, y reconozco que a lo mejor usé mal el ejemplo, pero el nominalismo es justamente llamar con un nombre a lo que no es”.

“La debilidad más grande que necesitan todas las personas, también estas personas, es justamente que se les respete y se les llame por el nombre más fundamental que tienen, el de persona humana”, indicó el líder de la Iglesia Católica chilena.

Sobre la molestia del Presidente después de sus dichos, Ezzati dijo que “tiene todo el derecho a estar o no de acuerdo, no sé cuál ha sido la fuente de información de él”.

“Pido disculpas a quien se sintió ofendido, nunca ha estado en mí el querer ofender a nadie (…) creo que el cambio registral es solamente parcial y no soluciona el problema de fondo de la persona”, concluyó.

Respecto de la eventual renuncia del Obispo Juan Barros, Ezzati aseguró que “eso no lo sé, porque naturalmente la relación con el santo padre es siempre una relación muy personal”.