Fue un día agitado para la Democracia Cristiana. Partió con una reunión con el ministro del Interior Andrés Chadwick, donde le plantearon la necesidad de avanzar en el proyecto de Nueva Constitución: bandera que levantará transversalmente la oposición durante este periodo.

La presidenta interina de la DC, Myriam Verdugo, dijo que el Gobierno aceptó que es un tema ineludible, pero no en los términos de la administración de Michelle Bachelet. Recalcó que la DC es y será un partido de oposición.

Sin embargo, la agenda de la DC comenzaba antes, pero el partido se restó nuevamente de la reunión de coordinación de la ex Nueva Mayoría, en la sede del Partido Radical. Según Verdugo, fue meramente por motivos de agenda, pero en el resto de las colectividades dicen entender que es parte del proceso de reflexión de la falange.

El jefe de bancada de los diputados democratacristianos, Matías Walker, fue más allá. Marcó distancia del tipo de oposición que hará, por ejemplo, respecto del Partido Comunista. Aseguró que la de su partido será más propositiva, haciendo juicio a la postura moderada que representa la falange.

A pesar de esa distinción y de la ausencia de la DC en la reunión, el presidente del PC, Guillermo Teillier, valoró el trabajo que se ha hecho en conjunto en el Congreso y consideró que están obligados a tener más acuerdos en la sede legislativa. Aseguró que no ve interés del Gobierno en reunirse con su colectividad.

Este jueves asiste al Ministerio de Interior el PPD, mientras el Partido Socialista también espera integrarse a esa ronda de reuniones. El presidente del PS, Álvaro Elizalde, pidió al Ejecutivo flexibilidad en cuanto a los temas y sus detalles, mientras que su par del PPD, Gonzalo Navarrete, dijo que la prioridad es conocer el detalle de las propuestas.

Para el presidente del Partido Radical, Ernesto Velasco, son prioridad para su colectividad los temas sobre pensiones y migración.