El aumento en la demanda por la vacuna en contra de la fiebre amarilla se disparó los últimos días, sobre todo por los casos de dos chilenos que murieron en Brasil a causa de la enfermedad.

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Sin embargo, hay ciertos grupos antivacunas que se niegan recibir las dosis, como Felipe Santander -una de las víctimas fatales-, quien siempre se mostró contrario a la medicación.

Al respecto, Esteban Maturana, presidente de la Confederación de Funcionarios de la Salud Municipalizada (Confusam), acusó al Ministerio de Salud por ese rechazo. “Las razones por las cuales muchas personas plantean la posibilidad de no vacunarse es la falta de información”, explicó.

Junto con ello, advirtió que se “puede generar un grave problema si no se toman medidas. El gobierno ha abandonado su pega en esta materia”.

Consultada por la acusación, la titular de Salud, Carmen Castillo, indicó que Maturana desconoce la cantidad de medicamentos destinados a la atención primaria.

“Consideramos que esas críticas que no corresponden. Es una opinión personal”, sentenció.