Trabajadores de Minera Escondida iniciaron hoy un paro de 24 horas en rechazo a supuestos maltratos e incumplimientos legales de la compañía.
“Represalia” y “revanchismo” acusan trabajadores, particularmente desde el Sindicato 1, debido al proceso de paralización que vivió la faena a comienzos de años. Proceso que culminó en marzo con una negociación donde se acogieron al artículo 369 del Código del Trabajo, extendiendo en 18 meses el contrato colectivo vencido en enero y, con ello, los beneficios de dicho instrumento quedaron sujetos a los pisos mínimos de la reforma laboral.
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Al respecto, el director del Trabajo, Christian Melis, dijo este jueves que la Dirección está monitoreando la situación y los despidos que se concreten, asegurando que intervendrán en el caso de funcionarios afectos a algún fuero sindical u otra situación especial.
La tensión entre las partes escaló en medio de acusaciones de incumplimientos legales y maltratos laborales por parte de la firma controlada por BHP Billiton –por ejemplo- en la ausencia de un mecanismo de control de asistencia, según dijeron en un comunicado esta mañana los dirigentes.
Esto en medio del despido de 120 funcionarios, desde supervisores hasta operadores, punto que para el director del Sindicato 1 de Escondida, Carlos Allendes, podría ser una “revancha” de la firma con miras a la negociación que deberán iniciar en junio próximo.
La paralización se extenderá hasta las ocho de la mañana de este viernes y, si bien se trata de sólo una jornada de paralización con la posibilidad de continuar la próxima semana, Escondida es el mayor productor de cobre del mundo, por lo que ésta tendría un impacto en el crecimiento de la economía en noviembre.
