Este jueves llegó a su meta la denominada Marcha por la Decencia, convocada por el Colegio de Profesores de Chile, que partió desde Santiago para llegar a pie hasta el Congreso Nacional, donde los docentes fueron recibidos por la Comisión de Educación de la Cámara de Diputados.
El presidente nacional del gremio, Mario Aguilar, se manifestó conforme con la recepción obtenida por el presidente de la comisión, Rodrigo Gonzalez, y los diputados Yasna Provoste, Cristina Girardi y Giorgio Jackson.
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Dichos parlamentarios escucharon sus demandas y se comprometieron a impulsarlas, una vez que el proyecto de ley de Nueva Educación Pública regrese a la comisión, luego que el Ejecutivo le quitara la suma urgencia.
En su declaración, Mario Aguilar no escondió su molestia ante el desconocimiento de la diputada comunista Camila Vallejos -integrante de la Comisión de Educación- respecto de los motivos de esta marcha.
Al respecto, Aguilar señaló que, como buenos profesores, no tienen problemas en repetir los contenidos las veces que sea necesario, hasta que los alumnos logren aprender.
El Gobierno quitó la suma urgencia al proyecto de Nueva Educación Pública, con lo que se abriría la posibilidad de incorporar las observaciones y demandas del profesorado.
Principalmente los docentes han hecho hincapié en que la nueva legislación no contempla un cambio del modelo educacional, sino más bien en su administración.
Además de lo anterior, el proyecto no consideraría saldar la deuda histórica que el Estado aun mantiene con el profesorado del país, y que en algunas comunas como Valparaíso, se ha incrementado a raiz de mala administración de los gobiernos locales.
