Aunque la idea de legislar aplicaciones como Uber fue apoyada por amplia mayoría, diputados de la comisión de Transportes de la Cámara manifestaron reparos a la denominada “Ley Uber”, ya que la propuesta del Gobierno generaría diferencias entre taxistas y los conductores de las aplicaciones.

Pese a esto, la ministra de Transportes, Paola Tapia, valoró el inicio de la discusión del proyecto en el Congreso y reiteró que para su elaboración se consideró la visión de todos los actores sociales.

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El proyecto establece un registro de plataformas tecnológicas, define los vehículos aptos para el servicio, y determina estándares de confort. Además, crea el pago de un valor por kilómetro recorrido, exigencias para conductores y define infracciones, entre otros puntos.

Iniciativa que en el gremio de los taxistas miran con incertidumbre. El presidente de la Confenetaxi, Luis Campos, sostuvo que seguirán la discusión y no descartó futuras movilizaciones, si el proyecto no cumple con sus expectativas.

A través de un comunicado, Uber celebró el comienzo de este proceso y manifestó que continuarán aportando con información para construir un marco regulatorio, mientras que Cabify dijo que es “una buena noticia”.

Los parlamentarios tienen hasta el 8 de agosto para introducir mejoras al texto legal, para que en la sesión siguiente comience la votación en particular de la iniciativa.