A través de un comunicado de prensa emitido este miércoles el Gobierno de Chile expresó su sorpresa y rechazó categóricamente las declaraciones del presidente del Estado Plurinacional de Bolivia, Evo Morales, quien acusó a nuestro país de vulnerar las disposiciones reglamentarias de la Corte Internacional de Justicia.

“Quien no respeta las reglas de la Corte y los principios de la buena administración de justicia es el Gobierno de Bolivia, quien, contradiciendo esas reglas, ha llevado reiteradamente el caso sobre “obligación de negociar acceso al Océano Pacífico” a diversos y numerosos foros internacionales, elaborando incluso un libro detallado con los argumentos de su memoria. Cuando un caso está ante la Corte Internacional de Justicia no es correcto llevarlo a foros distintos de la Corte”, argumenta el texto.

Chile respeta la regla de que los escritos de la Memoria y la Contramemoria no se pueden hacer públicos hasta el inicio de la fase oral del procedimiento, asegura el Gobierno. “Pero esta regla, en ningún caso, prohíbe que las partes puedan explicar e informar a la opinión pública de los casos que están pendientes ante la Corte Internacional de Justicia y de los derechos que están defendiendo ante esta Corte”, precisó.

“El Gobierno de Bolivia comete un error inexcusable al manifestar que Chile habría revelado contenidos de la memoria que entregó a la Corte Internacional de Justicia por el caso del río Silala. Los argumentos de Chile, presentados por las autoridades nacionales, están en conocimiento de la opinión pública a partir de la demanda, presentada al tribunal internacional el 6 de junio de 2016 y conocida ampliamente. Dicho documento fue publicado por la Corte Internacional de Justicia en su sitio en internet“.

“El Gobierno de Chile espera que el Gobierno de Bolivia cese el doble discurso y la hostilidad creciente hacia nuestro país, deje de politizar los casos en cuestión, y se limite a presentar argumentos en la Corte Internacional de Justicia, respetando plenamente las reglas de este tribunal para la solución pacífica de las controversias realmente existentes”, cumina el comunicado.