Un drástico revés sufrió la campaña que busca prohibir el rodeo en la capital de la región de O’Higgins, luego que Contraloría decretara que una ordenanza municipal no puede prohibirlo.

Hace unos meses, la organización internacional Animal Libre junto al concejal y exalcalde de Rancagua, Carlos Arellano, iniciaron una campaña contra la práctica ecuestre chilena.

Con el decreto de Contraloría, los impulsores aseguraron que seguirán un proceso para concretar un plebiscito comunal que permita considerar la opinión ciudadana ante esta tradición que tildan de violenta y maltratadora de cientos de animales.

Arellano aseveró que “nosotros vamos a seguir adelante porque entendemos que la democracia tiene una forma de pronunciarse, que es a través de actos legítimos y uno de esos actos son los plebiscitos comunales y para eso están en la ley”.

Desde la organización, consideran que hay un importante número de rancagüinos que está en contra de esa actividad, debido a las cientos de firmas que han reunido y a los resultados de las últimas encuestas nacionales, como el de la empresa Adimark, la cual en septiembre del 2016 señaló que un 87% de los chilenos no se identifica con la actividad del rodeo.

Por su parte la empresa Cadem indicó, en el mismo periodo, que un 56% se sentía poco o nada identificado con esta tradición.

Mauricio Serrano, fundador de Animal Libre, enfatizó que “con el tiempo hemos logrado un rechazo multitudinario a la práctica del rodeo. Ahora debemos comenzar a anular los preceptos legales que están blindando a esta cruel tradición y así acelerar su término, ya que este llegará, debido a que la ciudadanía, la razón y la justicia está de nuestro lado.”