El defensor nacional, Andrés Mahnke, entregó su respaldo al abogado que representa a Mauricio Ortega, Fernando Acuña, en el juicio por la brutal agresión que sufrió Nabila Rifo en Coyhaique, en mayo de 2016.

El jurista ha sido duramente cuestionado, especialmente en redes sociales, quien le consultó aspectos de su vida íntima y exparejas.

“¿Qué tiene que ver mi vida sexual con lo que me ha pasado?”, reclamó la víctima de 29 años, quien acusó a Ortega de haber sido el que la agredió la madrugada de ese 14 de mayo.

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Al respecto, la máxima autoridad de la Defensoría Pública descartó alguna intención de “menoscabar” a la víctima, quien debió responder en la audiencia las consultas del abogado Acuña, sin la presencia de público y con prohibición de dar detalles.

En medio del balance de la gestión institucional de 2016, Andrés Mahnke resaltó que “nada justifica que una mujer sea agredida” y que “su vida íntima o la de cualquiera no justifica la más mínima ni la más brutal agresión”.

No obstante, advirtió que, en este caso, “estamos frente a un verdadero juicio público”, principalmente por la alta exposición pública de las audiencias que han sido transmitidas en vivo por la mayoría de los canales de televisión, según publica la Defensoría en su sitio oficial.

Al respecto, Mahnke sostuvo que “se han realizado críticas directas al actuar de los defensores, se ha hablado sobre la defensa pública y su rol en el tratamiento de las víctimas en el proceso penal. Y quiero ser muy claro: nunca un defensor va a tener la intención de menoscabar a una víctima o afectar su integridad”.

En ese sentido, el defensor nacional aseguró que “farandulizar la justicia es el peor daño que podemos hacerle a Nabila Rifo, porque los juicios no pueden ser resueltos en función de la percepción pública mayoritaria. No hablamos de un reality”.

“Si sólo nos quedamos con la investigación y la percepción inicial, no sería necesario realizar un juicio y mucho menos contar con pruebas que demuestren la culpabilidad o inocencia de una persona. Y en un caso tan dramático como éste, la sociedad debe exigir verdad y no ajusticiamiento”, sentenció.