Antes de que termine el año 2017 es el plazo que se autoimpuso el Gobierno para despachar del Congreso el proyecto conocido como Ley de Fármacos Dos, que busca regular la industria de los medicamentos y favorecer el uso de remedios genéricos y bioequivalentes.

Para esto, la iniciativa busca restringir la venta de medicamentos de marcas propias, prohibir la alianza entre farmacias, regular los incentivos que los laboratorios entregan a los médicos para que recomienden ciertos productos en desmedro de otros y permite al Gobierno elaborar un observador de los precios que pagan los usuarios para transparentarlos.

El subsecretario de salud Pública, Jaime Burrows explicó que lo que se busca con el proyecto es reducir el gasto de bolsillo que los usuarios pagan por los remedios, el más alto de los 34 países que integran la OCDE.

La iniciativa es considerada un avance por los laboratorios. Sin embargo, el vicepresidente ejecutivo de la Cámara de Innovación Farmacéutica de Chile, Jean Jacques Duhart, afirmó que la receta genérica que emitan los médicos, podría provocar el efecto contrario y sean las farmacias las que recomienden los remedios a su criterio.

Además, el proyecto también recibió críticas de algunos senadores. El parlamentario de RN, Francisco Chahúan explicó que le parece inconstitucional el punto del proyecto que prohíbe las alianzas entre las farmacias y los laboratorios, conocida como integración vertical.

Los parlamentarios de la comisión de salud aprobaron el lunes pasado la iniciativa, por lo que ahora pasará a la Sala del Senado. El Ejecutivo pretende despacharlo a la comisión de salud de la Cámara de Diputados antes de que termine el presenta año legislativo.