Bajo el alero de José Antonio Gúzmán Matta como presidente del directorio de la Corporación Inacap (hasta 2012), se observaron “extraños” negocios en los que se beneficiaron diversas empresas -algunas en las que él presidió- con la venta de inmuebles vendidos a bajo precio, incluso por debajo del avalúo fiscal, según señaló Ciper.

En la investigación realizada por el medio, se señala que Guzmán en 1996 había dejado la presidencia de la Confederación de la Producción y el Comercio (CPC), uno de los gremios empresariales más importantes del país, donde estuvo seis años, y que entre 1989 y 1990 también había sido presidente de la Cámara Chilena de la Construcción (CCHC), gremio en el que actualmente también está involucrado a través de la AFP Habitat donde fue presidente por ocho años, hasta 2014 y que tiene representación en la CCHC.

La Corporación Inacap (incluye CFT, IP y Universidad), en manos de Guzmán Matta, pasó de tener 51 inmuebles a 37, con ventas poco afortunadas para la institución como las cuatro propiedades en Las Condes, donde Inacap vendió en una sola operación y a bajos precios a Germán Molina Morel, ex presidente de la CCHC en la decada de los 80 y presidente de AFP Habitat entre 1986 y 1999.

Pero esto no era tan perjudicial como las ventas entre 2005 y 2006 a bajo precio, también por debajo del avalúo fiscal, de un terreno en Talcahuano y la compra de otro en la comuna de Maipú a la empresa Inmobiliaria del Grupo Guzmán & Larraín, fundada por Guzmán Matta y Juan Larraín Doggenweiler.

La Inmobiliaria Río Napo, de Guzmán Matta, que tenía a su haber un vasto terreno en la comuna de Maipú, vendió a Inacap en 2006 una cuarta parte del terreno -18 mil metros cuadrados- en $2.100 millones de pesos, donde actualmente se encuentra una de sus sedes. Esta jugada benefició a la empresa de Guzmán, donde recuperó la inversión total que hizo al comprar el terreno, aunque vendiera sólo una cuarta parte al centro de estudio.

Inacap Maipú | www.inacap.cl
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El presidente Inacapino aseguró a Ciper que él no participó en el directorio del centro de estudio, pero sí en el de Río Napo diciendo que “somos dos socios no más, y no hay otra alternativa. En Río Napo participé en la aceptación de la oferta de Inacap”, donde además se aceptó un terreno que Inacap tenía en Talcahuano.

Ese terreno, habría sido comprado por la Inmobiliaria Río Napo a Inacap por $640 millones de pesos en 2005, mismo año en que el SII lo avaluaba en $922 millones. En él se construyó un conjunto habitacional “Jardines del Sur”, ubicado a metros del Club Hípico en Talcahuano. Las torres tienen 15 pisos cada una, con departamentos que van entre las 1.300 a 1.560 UF.

El empresario asegura que “yo me marginé de esas decisiones, y eso consta en las actas. Esto fue una gestión de la administración de Inacap a la que le interesaba el terreno en Maipú por su ubicación estratégica”, afirmó al medio, agregando que para Río Napo el negocio habría sido un fracaso por la difícil venta de los departamentos y el bajo precio al que tuvieron que vender, rematando que “el gran ganador de todo esto fue Inacap”.

Negocios en todo el país

Otros de los inmuebles vendidos en 2005 por Inacap, fueron las cuatro propiedades en Camino El Alba en Las Condes a la Inmobiliaria Molina Morel por $513,7 millones de pesos, pese a que diez años antes, las mismas propiedades habían sido adquiridas por $658 millones de pesos, monto que incluso aumentó en el tiempo, con una tasación por $867 millones en 1999.

La Inmobiliaria Molina Morel, de Germán Molina Morel, construyó un edificio de ocho pisos en el terreno, por departamentos avaluados en $94 millones de pesos, lo que resulta conveniente para el ex presidente de la Mutual de Seguridad de la CchC y medalla de oro en 2001 de la Cámara Chilena de la Construcción, por su vasta trayectoria.

Así se vendieron otros terrenos en la región. En Las Condes, Inacap vendió un terreno en Padre Hurtado a la empresa Plaza Vespucio S.A por $5 mil millones de pesos, que ahora pertenece a Plaza Cordillera S.A, ambos del Grupo Mall Plaza, donde ya tienen luz verde para construir el Mall Plaza Los Domínicos; y en Ñuñoa vendieron un inmueble a la empresa Penta Vida, propiedad de Carlos Délano y Carlos Lavín, por $2.500 millones de pesos. La empresa es socia de la Asociación de Bancos, que es miembro de la CPC.

En tanto, en Viña del Mar, se vendió un terreno a la Inmobiliaria Centro Viña, donde se construyó un edificio por la empresa Claro Vicuña, ambas socias de la Cámara Chilena de la Construcción de Valparaíso; y en Valparaíso, el ex edificio de Inacap, es ahora propiedad de Corfo y es ocupado por la municipalidad.

En el sur, Inacap vendió su ex sede en Curicó – hoy Universidad Católica del Maule – a la sociedad Alto Aragon, y en Concepción, una propiedad en el sector Camilo Henríquez, donde se proyecta un barrio residencial, aunque no hay mayores antecedentes de la venta de éste último inmueble.

En Talcahuano, el terreno que actualmente ocupa el centro de estudio, fue comprado por $1.350 millones de pesos a la empresa Ingeniería y Construcción San Andrés, de la familia Imschenetzky Ebensperger, quienes también están a cargo del Casino Marina del Sol, a un costado de Inacap.

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En Temuco, el ex terreno donde funcionaba el centro educacional es usado ahora por la Universidad Santo Tomás y los registros indican al Banco Santander como dueño de la propiedad. En tanto en Puerto Montt, la ex sede del centro de estudios pertenece a la empresa Inversiones e Inmobiliaria TSG.

En el norte del país, la ex sede en Iquique es, desde 2011, propiedad de la Inmobiliaria JK, que forma parte del Consorcio Inmobiliario Rayos, al que pertenece Patricio Pavés Soto, actual presidente de la CchC de Iquique.

Además, en la ciudad vendió otro inmueble, ubicado en Aníbal Pinto 375, actual sede de Aguas del Altiplano, socia de la CchC de Iquique.

Finalmente, Inacap vendió en La Serena su antigua sede a la empresa Inversiones San Javier y otro inmueble a María Mery Larraguibel, que actualmente se usa como hogar universitario arrendado a la Municipalidad de Montepatria.